viernes, 6 de febrero de 2009

Cardenal Bertone recuerda que "Dios es fuente y garantía de todos los derechos"

El Secretario de Estado Vaticano, Cardenal Tarcisio Bertone, señaló que "cuando el Magisterio de la Iglesia habla de los derechos humanos no se olvida de fundarlos en Dios, fuente y garantía de todos los derechos, ni tampoco se olvida de enraizarlos en la ley natural".
En su conferencia "Los Derechos Humanos en el Magisterio de Benedicto XVI" dictada hoy en la sede de la Conferencia Episcopal Española, en Madrid, en ocasión de los 60 años de la Declaración Universal de los Derechos Humanos, el Purpurado recordó "la fuente de los derechos no es nunca un consenso humano, por notable que sea".
El Papa Benedicto XVI, continuó el Cardenal Bertone, en el Mensaje para la Jornada Mundial de la Paz 2007, enseña que "el reconocimiento y el respeto de la ley natural son también hoy la gran base para el diálogo entre los creyentes de las diversas religiones, así como entre los creyentes e incluso los no creyentes". Noticia completa en ACI.

alguna de las 25 frases de la religion y el estado

25.-Es necesario salvaguardar la dignidad de la persona humana, propugnar una amplia visión de las relaciones sociales que incluya el diálogo Estado-Iglesia, que refuerce la colaboración con las instituciones civiles para el desarrollo integral de la persona y el derecho a la libertad religiosa, que facilite el libre ejercicio de la misión evangelizadora de la Iglesia y que señale el deber de la sociedad y del Estado de garantizar espacios donde los creyentes puedan vivir y celebrar sus creencias. En este contexto, la Iglesia pide hacia su misión en el mundo, manifestada en variadas formas individuales y comunitarias, la misma actitud de respeto y autonomía que ella muestra hacia las realidades temporales.



6.- Todo hombre vive de un entramado de sueños y realidades. Todos aspiran hoy a una vida donde reine la paz y la justicia. Cuando defienden un derecho no mendigan un favor, reclaman lo que les es debido por el solo hecho de ser hombre. Por eso se llaman derechos naturales, innatos, inviolables e inalienables, valores inscritos en el ser humano.



15.- El Santo Padre pone de relieve, en primer lugar, la responsabilidad que incumbe al Estado: todo Estado tiene el deber primario de proteger a la propia población frente a las violaciones de los derechos humanos. Es decir, le incumbe un papel activo en la defensa y protección de los derechos, hasta el punto de que esta es su misión esencial.